A veces necesitamos tomar un poco de aire. Detenernos un poco y reflexionar, cabilar, respirar profundamente, exhalar, fumarnos un cigarrillo, oír un poco de música y pensar. Hacer una síntesis de nuestra vida, valorar, evaluar nuestros errores, sopesar las decisiones que con el tiempo nos han colocado en el lugar en el que estamos, retroceder un poco en el tiempo, sólo un poco, recordar fugazmente, no debemos invertir demasiado en esto.
Todo implica un costo, tal o cual decisión, aquello que dejamos sin hacer por hacer algo más, así es como vamos trazando el camino que tomarán nuestras vidas, muchas veces habrá de bifurcarse como consecuencia de una decisión tomada en un mal momento, en un arrebato, con ese dejo de ira de un momento difícil y sabremos que hemos errado al pronunciar la última de las palabras que comuniquen nuestra decisión, pero que más da, es parte del juego, del riesgo, es nuestro margen de error.
Así, nunca sabremos como pudo ser nuestra vida, la otra vida, solo nos queda elegir de entre las opciones que tenemos a la vista, si nos equivocamos, o no, es algo que nunca sabremos... pero que más da, imaginemos.
Desde ya, un abrazo.